Estaba hace unos momentos en cierto lugar haciendo equis trámite, cuando escuché a alguien que decía en voz un tanto alta:
Ah, pero solamente es cagado el que se deja cagar, querido.
Increíblemente miré para el costado a ver si era cierto lo que estaba oyendo, y no solamente era cierto sino que su interlocutor añadió mientras se subía a un taxi:
Sí, y qué bien que les viene a algunos ese discurso... en realidad es "me dejé cagar", para victimizarse.
Sorprendentemente, estaba asistiendo a un alegato del "tenemos todo el derecho del mundo cagar a otro, total, siempre va a ser culpa de él".
9 comentarios:
Es una linda excusa para volverse estafador, o ministro de economía, lo que viene siendo la misma cosa. También sirve usurpar un titulo. O para ocupar un cargo público. perdón, se volvió redundante, con decir estafador alcanzaba.
beso
W
El que no trabaja es porque no quiere. ¿No?
Ah, y muy linda la nueva mano de pintura del blog. Pero los tres de arriba �se quedan?
Claro.
Y el que trabaja en negro y es explotado es exclusivamente porque quiere.
Vamo'a ver, si lo saco al General del medio el Amperio se me enoja, si lo saco a Karadagián estoy renunciando a parte de la lucha (?) y si lo saco a San Martín, nos quedamos sin cruzar los Andes.
Estoy pensando qué hago.
A ver repítan conmigo:
Yo no quiero ser un cagador.
Quiero ser una buena persona.
Aunque me caguen.
Aunque el mundo se venga abajo.
Aunque gane las selecciones el Alberto... o el bótox.
Derecho de cagar al otro?? ja, capaz que eso enmascara otras fundamentacagaciones
A saber:
del garca ganador: "el que caga primero, gana";
del garca solidario: "ése parece que anda buscando que lo caguen";
del garca bueno: "creeme que no fue mi intención";
del garca buen amigo: "algún dia me lo vas a agradecer";
del garca irresponsable: "mirá lo que me hacés hacer"
etcs.
"La culpa no es del chancho", dijo Ludovica Squirru.
Ahora sí, dejame ir a dormir Bater ;)
Laura, la del garca buen amigo... tal cual. Conozco un par de casos.
Venusina: esto de los husos horarios es complicado. A veces el que le da de comer es más chancho que el propio chancho.
Bah, me enredé.
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