viernes, agosto 15, 2008

nos tapó el... la... o sea... en fin, nos llegó eso mismo al cuello

Les aviso que la noticia es fete, muy fete:


Como se puede observar, incluso le han prendido velas a la imagen de la pared (clic para ampliar e intentar suponerla), lo cual puede significar un riesgo enorme para la divina efigie: el líquido se suele evaporar cuando se lo expone a fuentes de calor, a menos que se piense que tal aparición prodigiosa será capaz de resistir a los embates de la temperatura.

Ahora, prestemos atención a lo que sigue:


El bendito can, agente de esta sacra maravilla enurética, tuvo el acierto de ir a hacer pis en una pared de la calle... Aguado. Como si lo hubieran iluminado a los efectos de.
Lo que sí, pobrecito, parece que dejar una meada divina en un muro, es meritorio de la intervención de los agentes del orden, tal como al final de la nota se manifiesta:

Ojalá el can no se haya visto capturado y puesto entre rejas por desafiar a las leyes del mantenimiento del espacio público.

Ahora bien: no me quiero imaginar la advocación de la divinidad de la pared, cuyas fotografías seguramente adquirirán la forma de estampitas -a ser vendidas según la religiosidad popular lo demande-, o sí me la quiero y es más, me la estoy imaginando, pero poblaría el fondo de este blog con irreverencias que quizás a algún creyente pudieran ofender.

Quévasér, la nota completa, como para producir quizás otras bienaventuradas manchas en vuestros calzones, aquí.

+ Link relacionado: otro post en este mismo blog, que relata la aparición de un Cristo en una puerta, las tostadas del desayuno, una tortilla mexicana y la mancha de grasa de una sartén, entre otros.

15 comentarios:

Mauro Duarte dijo...

Eso es tomas demasiada agua bendita. Les dije que abusar era malo, pero claro, a mi nadie me hace caso.

Anónimo dijo...

Tostadas, tortilla, grasa, meo...
Es que El Señor esta en todos lados, se manifiesta misteriosamente (?), por eso.

Si, puede ser que el perro haya pasado por la iglesia mas cercana y se bajó toda el agua bendita.

Mona Loca dijo...

O sea que ahora está bueno "estar meado por los perros"!!!
IUPI, IUPI!!!!!

Paula dijo...

Ya los veo buscando al perro por todo Santa Fe para darle agua y que piye milagros.

Germán dijo...

Insólito, pero igual de insólito que otros objetos de fe como San La Muerte, el Gauchito Gil, vírgenes varias, y tantísimas cosas que de puro cotidianas sorprenden menos.

Anónimo dijo...

Eso no es nada.
Mi perro es adicto a las estampitas. Ya se zampó una de san expedito, otra de la santa rita y además come inciencio.
Sus soretes adquieren formas tan sacramentales y litúrgicas que un día de estos las voy a mandar al vaticano a que me canonicen.

Anónimo dijo...

era incienso, pero bueh... a los fines religiosos es lo mismo...

Anónimo dijo...

¿Hay mucha diferencia entre creer en el carácter milagroso de esta meada, y creer que tocando una estatua de San Cayetano mejorarán las condiciones de empleo del tocante y sus allegados? Yo pregunto, nomás.

La libelula dijo...

Se rumorea que en esa pared de la casa florecen Doguis, y que los vecinos ya venden las pezuñas de SANPICI (lo decimos en italiano para que el Vaticano lo entienda) =P

Anónimo dijo...

Y eso cómo se entiende? Será arte o milagro? O ambas...
Yo me mando de vez en cuando unos efluvios úricos, pero nunca pude más que escribir mi nombre en la nieve.

Francis dijo...

semeoelperro.gif


jajaa

Cesar dijo...

Diantres!
O sea que ojo antes de meter la mano en el batipsterio (asi se decía?)ya que puede haber Orina de perro.
Pensar que antes te convertian el agua en vino..como ha decaído todo...

Anónimo dijo...

Ultimo momento, y esto es verídico, amiga: acabo de escuchar en una radio acerca de este caso. Parece que un cura importante de Santa Fe, ponele un obispo o algo así, negó que esta meada de perro sea una manifestación divina. De todos modos, dijo, "hay que respetar la religiosidad popular". La Iglesia no se quiere poner mal con nadie, parece. Propongo que nos pongamos a adorar una porción de lasagna, a ver qué reacción tiene la cúpula eclesiástica.

Paula dijo...

germán: el Gauchito Gil no se mancha!

luc: merda di santo (enlatala y vendela!!)

gerald: creer o no creer, esa es la cuestión.

laliten: cuidado con el perro, milagrea.

guty: creer es un arte, a veces.

sir francis: je,bien ahí.

cesar: la religión va para atrás. mire sino al padre grassi. :P

gerald2: yo sigo adorando mi mate amargo, mi lamparita de lava y una estampita de Evita que me regaló el GG allá lejos y hace tiempo. Total...

Uno de los ocho dijo...

El perro sería el scrappy doo que se le aparecía en el piso a usted, junto a Perón y al dragón de komodo