viernes, agosto 17, 2007

un cadáver exquisito

No como la muestra esta del Abasto (la gigantesca fiambrería por 30 pesos), pero acá también tenemos algo inspirador: un pequeño cadáver exquisito que usted, querido lector, deberá seguir (si se le canta la gana, claro).

Instrucciones:

+ Cada comentario tiene que empezar con un "entonces", así continúa lo dejado por el comentarista anterior. Va a quedar una porquería, o como un relato de un nene de 4 años, pero no importa: la cuestión es hinchar un poquito.
+ La gracia está en escribir cualquier cosa respecto a la foto, pero más o menos con cierto tipo (cierto tipo) de coherencia. Otra gracia (un poco más caprichosa), es que los comentarios estarán vedados a la vista del público hasta el martes, así que el que quiere escribir, escribe, arriesgándose a que quede un collage literario horrendo. Allá cada uno de ustedes, señoras y señores.

A modo de inspiración, la foto (clic para agrandar) y algunos renglones iniciales.



Susana y Enzo tomaban mate sin darle mayor pelota a todo lo que sucedía alrededor. Tanto fue así, que terminaron cayendo en esta foto sin darse ni la menor cuenta.
Entonces...



PD: vuelvo recién el martes. Intentaremos hacer contacto con la srta. SOOL allende el RDLP. Y no, no hay chiste neustad porque me colgué, mal. Post in memoriam un blog que tenían el Conde y Alechuguita, que estaba copao.

19 comentarios:

Anónimo dijo...

Entonces, Susana miró el reloj, se despidió con un beso demasiado cortés para los deseos de Enzo e intentó caminar hacia su derecha...Y se topó con el marco de la foto. Enzo creyó, ilusionado, que ella tendría algo más para decirle y por eso se había frenado en seco. Susana volvió sobre sus pasos y se sentó, resignada.
- Alguien nos sacó una foto -explicó. Es difícil poder salir del cuadro: hay que encontrar a quién la sacó antes que se vaya de la plaza. La mirada de Enzo, condimentada por una sonrisa pícara, encendieron una luz de alarma en Susana.
- Yo sé quien fue.
Pero no te lo pienso decir.

Cale dijo...

Entonces...fue cuando el barrendero Aníbal se dio cuenta que le estaban sacando una foto...y temió por su vida. El infame plan que estaban tramando podía quedar desbaratado por una inocente fotografía.
Pero, ¿era la foto tan inocente?

Vill Gates dijo...

Entonces, a vos te gusto eso?
Me parece una bazofia todo lo que dijiste
No entiendo como esos dos no se van a char lar a un café tomando un ídem.

Chap! dijo...

Entonces el barrendero reveló su verdadera identidad y se presentó como el duende Pirulo y ofreció consederles un deseo. Enzo le pidió si podía cambiarle la yerba del mate.

Chiru dijo...

entonces... a Susana le sonó el celular... era su marido que había salido a correr por el parque y la vió con otro hombre (ver sujeto de pantalón corto sentado en el banco de atrás)
Y a la pregunta de "dónde estás mi vida?" ella se quedó sin palabras...

Anónimo dijo...

Entonces Susana lo mira y no puede creer que ha pasado media tarde con el plomo de Enzo. Que se hace el cheronca y habla...

-Por que entonces vino El Negro, y JAJAJAJA...
-¿¿¿Qué dice este tipo???. Ojalá hubiera rechazado la oferta de venir a la plaza, mirá, pucha, el sol que hay, me hubiera ido con las chicas a hacer pelota la tarjeta, y ahora...¿Cómo salgo de este barrio? ¿Adonde me trajo?...La putta, ahora me lo tengo que aguantar en el camino de vuelta!!!

Anónimo dijo...

El le dijo a ella que la amaba. Ella no supo qué responder. El lo volvió a decir. Ella dijo esta vez que no, que no podía quererlo, que mejor era irse.
Entonces...

rakusito yeites de la hostia dijo...

Entonces el empleado de Cliba estaba tramando junto al señor que hacía ejercicios, la manera mejor de poder arrebatarle el mate a susana, con la idea de que "Aquí en El Rosedal todo comienza con alguien que calienta la pava". Entre tanto, Enzo le contaba a Susana sobre "Aquélla vez que en la secundaria intercambiábamos figuritas Cromy de los Thundercats". Pero el fastidio y la desidia iban apoderándose de la buena voluntad de Susana...

betty dijo...

entonces, Susana se dio cuenta de que Joseph se olvidó de encabezar con entonces y decidó propinarle una trompada a Enzo

El Angel Gris. dijo...

Entonces el sicario recibió el llamado que le ordenaba, matarlos a ambos.

Anónimo dijo...

****** ¿Cómo? ¿Me quedé dormido todo el fin de semana largo, ya es martes y han sido abiertos los pliegos del cadáver exquisito?

Pero las calles acusan la calma dominguera. ¿Es posible una diferencia horaria tal en la Tierra que ya sea martes en alguna isla del pacífico donde Bater haya fijado domicilio particular?

No me pasaba algo así desde un día en que se me descompuso el reloj y fui a donde tenía que ir 3 horas antes de la hora. Lo que no hubiera sido gran cosa de no pasar esto a las 6 de la mañana y no darme ninguna cuenta.******

Uno de los ocho dijo...

Entonces pensó que todo estaba demasiado aburrido, demasiado solitario, demasiado gris. Y se empezó a imaginar que no estaba allí sentado, sino en algún lugar abierto, tomando aire fresco, un parque o una plaza.

Y también se le ocurrió que podría haber gente, también. Y se imaginó un empleado de algún servicio, no importa cual. Y de tanto imaginar, imaginó árboles, parejas tomando mate discutiendo estupideces de esas que realmente importan, y hasta se imaginó a la plaza rodeada de movimiento, gente que viene y va, edificios cuyos estacionamientos estaban abarrotados de vehículos de toda especie y raza, credo y religión. Y se imaginó también gente sacando fotos, retratando momentos comunes para ser consagrados a la fama o relegados al olvido, como suele pasar.

Y justo cuando estaba imaginando todo esto, llegaron las empanadas y el tuvo que dejar de imaginarse atleta y levantarse del sillón para abrir la puerta.

Corvina dijo...

Entonces sus miradas se volvieron a encontrar, y sus besos fueron más dulces que los mates y se quedaron juntos, en un abrazo tibio como el solcito de la tarde.

Anónimo dijo...

Entonces la miró con mas detenimiento.
Gruesas venas y nervaduras la recorrían a todo lo largo, "algo voy a tener que hacer se dijo..."
Se agachó hasta el último cajón. revolvió los innumerables cachivaches hasta que dio con el. Una especie de martillo, pero con una forma mas bien cúbica y de un metal indefinido, capaz aluminio. volvió a mirar la carne y comenzó a darle con el martillo. No compro mas pulpa a seis pesos dijo y se secó el sudor que caía por su frente...

numaleon dijo...

Entonces ¡Susana desenvainó el termo y echó su contenido hirviendo sobre el rostro de Enzo!...

Anónimo dijo...

Entonces el fotógrafo, que se acercaba a ellos para pedirles sus nombres y publicarlos, gritó espontáneamente y a la voz de tres todos voltearon hacia la derecha y empezaron a bailar

Fla-q dijo...

Entonces, Susana empezó a imaginar la vida conyugal junto al amarrete de Enzo. Pensó que si no había tenido la decencia de pagar un café en un bar cualunque, el día que tuviera que financiar un par de medias de nylon 3/4, le iba a dar un colapso cardíaco. Susana predijo para sí un porvenir de carestías y sinsabores.
Entanto, Julián, que no lograba sacarse la cera de la oreja con el celular, manejaba como viable la posibilidad de mangarle el rastrillo al muchacho de Cliba.
A todo ésto, Enzo con el culo tieso por culpa del banco helado, especulaba con cambiar a Yerba La Hoja con palo. Si la halitosis de Susana era capaz de superarla, la iba a inscribir en el Guiness y proponerle repartir el premio.

Témpera Mental dijo...

Susana se tocó nerviosamente la barbilla y decidió que ese era el momento.

Reflexionó, buscando las palabras, mientras veía como el se sujetaba una pierna con ambas mano.

Finalmente, juntando coraje lo miró y le dijo:

- Enzo, tenemos que hablar, esto no da para más.

Sorprendido él rápidamente le preguntó que le pasaba.

- ¿Cuánto tiempo hace que venimos cada tarde de sol a tomar mate aquí?

- Meses, no creo que llegue a un año -respondió Enzo.

- Ya no aguanto más, dijo con voz trémula Susana.

El la miró inquisitivo esperando que ella le asestara el golpe de gracia, buscaba mentalmente palabras para pedirle que no lo dejase y cuando iba a pronunciarlas, ella le tapó la boca y dijo:

No tomaré nunca más mate contigo.

¡Sufro de gastritis!

Témpera Mental dijo...

Susana se tocó nerviosamente la barbilla y decidió que ese era el momento.

Reflexionó, buscando las palabras, mientras veía como el se sujetaba una pierna con ambas mano.

Finalmente, juntando coraje lo miró y le dijo:

- Enzo, tenemos que hablar, esto no da para más.

Sorprendido él rápidamente le preguntó que le pasaba.

- ¿Cuánto tiempo hace que venimos cada tarde de sol a tomar mate aquí?

- Meses, no creo que llegue a un año -respondió Enzo.

- Ya no aguanto más, dijo con voz trémula Susana.

El la miró inquisitivo esperando que ella le asestara el golpe de gracia, buscaba mentalmente palabras para pedirle que no lo dejase y cuando iba a pronunciarlas, ella le tapó la boca y dijo:

No tomaré nunca más mate contigo.

¡Sufro de gastritis!