lunes, abril 09, 2007

el cuarto aniversario de una bola de nieve

Hace días que estoy por colgar algo acá al respecto pero por diversas cuestiones inherentes al frasco propio, no logré escribir nada (ni decente, ni poco pasable: nada es nada).
Se iba a pasar la fecha, y si de algo no tengo ganas de olvidarme, es de esto.
Porque de la caca de todos los días nos enteramos, la leemos, la vemos en los noticieros, la padecemos y como si fuera poco, nos la cuentan cuando llegamos a casa, a la oficina o nos encontramos con alguien por la calle. Y para mí esto no es caca, sino todo lo contrario: es un aniversario que si no existiera, para muchos de nosotros la vida sería diferente.

Un par (en realidad, más de un par) de años atrás alguien me dijo "che, mirá, este es uno de esos blogs que te decía" y me deslumbraron tanto el formato blog... como el contenido de ese blog. El tipo dibujaba, hacía figuritas, escribía más de una cosa... no sabía a primer golpe de vista si graciosa o simpática, pero que reflejaba bastante mi forma de pensar algunos aspectos de la vida, algunos enojos y algunos festejos también. El tipo posteaba lo que se le cantaba la real gana y sus ganas eran bastante de alguna forma las mías.

Empecé a leerlo todos los días, cuando ni siquiera existía eso del RSS ahí. Así pasaron posts increíbles, donde se arrancaba una historia y cada comentarista la iba siguiendo, donde había que poner qué veíamos en las nubes, donde una simple mancha de una taza de café era capaz de disparar comentarios de toda índole; se armó la hecatombe en un post sobre Robbie Williams (loccccccas las fans se pusieron con eso), en otro sobre los Beatles casi se van a los machetazos, y en uno donde a alguien se le ocurrió comentar sobre cierto Padre Ignacio, terminó armándose una cadena de oración con pedidos y relatos de milagros varios.
Después vino el zafarrancho de los de siempre, el F5 compulsivo de los trolls, el cierre de los comentarios. Y en el medio algún hackeo por parte de uno de esos que nunca faltan y que te hacen el blogueo arduo y espeso.

Releyendo sus posts, encuentro los nombres de comentaristas que hoy son mis amigos.
Mirando sus dibujos pienso que pocos logran llevar una metáfora tan bien vertida desde el lápiz como él. Pocos me sorprendieron tanto como para largar la carcajada como él.
Revisando su historial veo que una de sus figuritas era ésta.

De resultas, con Demián nos terminamos haciendo amigos; compartimos cafés, laburos, noticias de nuestros hijos, delirios, proyectos, horas de teléfono. Creo que debe ser una de las personas con las que nunca me peleé pese al trato frecuente que tenemos; compartimos también una idea sobre "cómo internet", hemos hecho de celestinos involuntarios con gente que conocimos por este medio (curiosamente, él también es factótum del lazo amoroso Mendoza-Baires de algunos), y nos ha deparado más de un encuentro hiper feliz con gente de oro.
Como él mismo me dijo la última vez que hablamos: "Estos lazos no se daban hace 10 años. Esto le cambio la vida a la gente mas o menos común, no a los geeks". Los geeks no se ponen a filosofar sobre los helechos: tienen un millón de cosas más importantes en las que pensar, como ser, los sorobonchos de 10 terabits.

Será porque somos gente comúnmente similar que el país nos cría y los blogs nos amontonan, no pude hablar de Demián y de su Arbitrario sin hablar un poquito de mí -lamentablemente para él, a esta altura del partido- porque gracias a él este blog que es parte de alguna faceta mía y donde esto está ahora escrito, existe.

Felices 4 años a Arbitrario.
Gracias Demián por hacernos conocer desde dónde puede empezar un blog.

5 comentarios:

MICH dijo...

Yo soy un neófito acsoluto en este asunto de los blogs, así que le di una mirada al Arbitrario. Me arrancó carcajadas insospechadas en mí. Algunas escondidas en este día del totó que me sorprendieron gratamente. Muy gratamente. Gracias por la presentación Bater.

Anónimo dijo...

Ya le heché un vistazo y ahora vamos a pegarle uno más profundo.

Thanks to Bater for the datito.
Me voy a conocer este nuevo universo.

Perrot dijo...

Uh! grosso, hay comentarios mios de 2004, ja!

Entre Arbitrario y Bonsai Gigante, pasé mis primeras horas leyendo y mirando blogs.

Paula dijo...

Son dos de los amigos (de los MUCHOS amigos) que hice por este bendito medio, perro.

También encontré comentarios míos con el nick alternativo que usaba allá, creo que eso me causó mucha gracia también.

De uno u otro modo, todos entramos a esto por Arbitrario, el Bonsai, Korochi, Habbi, y algunos más.

Anónimo dijo...

Fue de los primeros blogs que leí. Probablemente, el segundo. Llegué allí desde "Puto el que lee" y cuando todavía seguía sin entender qué cuernos era esto de los blogs.

Larga vida a los blogs (y corta a los trolls, por favor).